Hoy en día el crecimiento de dispositivos que demandan una conexión de Internet sin cables en el hogar crece exponencialmente
Sea en la oficina o en el hogar contamos con smartphones, televisores, tablets, portátiles y diversos equipos inteligentes que pese a disponer de una conexión estable o de tener repetidores/extensores de red, las redes inalámbricas no funcionan de manera óptima. Especialmente cuando el tamaño de la casa u oficina es considerable o posee muchas habitaciones aparecen estas zonas oscuras, donde la señal es muy baja o nula.
Las soluciones más usadas actualmente para revertir esa situación son recurrir a un router más potente o con más antenas, y sobre todo repetidores o extensores de red, principalmente por su coste más asequible. Sin embargo el problema permanece y en muchos casos el funcionamiento no es el que esperábamos.
¿Qué es una Red WiFi Mesh?
Una red WiFi Mesh o red de malla en español es una red que está compuesta por un router o estación base y varios puntos de acceso, también conocidos como satélites o nodos. La principal diferencia entre una red WiFi de malla y una red con repetidores es que en la primera tenemos nodos que se conectan entre sí. Esto quiere decir que los diferentes puntos de acceso no sólo están conectados al router sino que también son capaces de conectarse entre ellos, lo que permite una mejor cobertura y una mejor gestión de la red.
Estos equipos funcionan con una única red Wifi con el mismo SSID y contraseña, a diferencia de los repetidores que una vez configurados aparecen como una red diferente y no se comunican entre sí, perdiendo señal mientras se alejen al router principal.
Hoy por hoy la mayoría de los dispositivos Wifi Mesh, tienen un diseño mucho más estético y compacto, lo cual reduce la percepción de desorden. Pueden dejarse a la vista, porque su diseño amigable para el hogar es lo suficientemente discreto como para integrarse con el resto de la decoración.
Para su configuración, en casi todos los casos, basta conectarse e ingresar a su aplicación respectiva para poner el sistema en marcha. Lo cual simplifica mucho su uso y hace más cómoda la experiencia de usuario.
Una desventaja evidente podría ser el costo de estos sistemas, en comparativa con las otras opciones más económicas que pretenden solucionar el problema de una mala conexión, pero podemos decir con seguridad que la inversión en un sistema mesh es totalmente válida por su simplicidad y la garantía de tener un funcionamiento más optimizado.